lunes, 18 de diciembre de 2017

Osvaldo Fresedo, el "Pibe de la Paternal"

Fuente: Voces de la Comuna 15

Hoy recordaremos a uno de los porteños más grandes de nuestro tango, nada más y nada menos que al gran Osvaldo Fresedo, conocido como “El Pibe de la Paternal”, injustamente poco recordado en la actualidad a pesar de su magnífica trayectoria junto a grandes valuartes tales como Julio de Caro, Aníbal Troilo y Carlos Gardel.Otro de los grandes del tango y bien grande lo fue Osvaldo Fresedo, conocido como “El Pibe de la Paternal”.
Nacido un 5 de mayo de 1897, hijo de Clotilde García y Nicolás Fresedo, quienes vivieron en Ramos Mejía, para volver a la Capital a la calle Billinghurst 434, luego al hermoso barrio de Floresta en Gualeguaychú y Segurola y constituir su hogar en Av. Del Campo y El Cano, barrio de la Paternal. De chico tuvo inclinación por la música por cuanto su madre era profesora de piano. Allá por el año 1914 se le pinta una importante ocasión ya que lo convocan para actuar en el Café Paulin, sito en Av. San Martín entre Donato Alvarez y San Blas. Al año siguiente pasó al Maldonado con el pianista Antonio Basso y el violinista Enrique Modesto para luego hacer los carnavales en el teatro Municipal de Pergamino.En el año 1917 y para animar los bailes de carnaval en el teatro Colón, fue convocado para integrar la orquesta Firpo – Canaro, dos pilares del tango. Invitado a reforzar con su bandoneón la orquesta Mirabelle, participa de la inauguración del casino Pigalle el 24 de mayo de 1918.Fue tan grande su éxito personal que enseguida sobreviene la propuesta: formar su propia agrupación a lo que Fresedo accede y se dispone hacerlo a lo grande, tanto es así que entre los notables músicos que designa, uno robustece el carácter histórico y no es nada menos que Don Julio De Caro, artífice de nuestra música y nacido un 11 de diciembre, fecha en que se conmemora el “Día Nacional del Tango”. El primer conjunto se integra así: Julio De Caro y Rafael Rinaldi en violines, José María Rizzutti en piano, Hugo Baralis (Padre) en contrabajo y por supuesto Osvaldo Fresedo en el fuelle, un fuelle de smoking. En su exitosa y larga trayectoria Fresedo acompañó a Carlos Gardel, a Agustín Magaldi, a Ada Falcón, al tenor Tito Schipa y al cantor melódico Pedro Vargas.Con Enrique Delfino y Tito Roccatagliata conformaron un trío, más conocido como la orquesta típica “Select” realizando varias giras por el mundo y dejando en 1920 una serie de grabaciones en Canadá y EEUU.El primer estribillista que tuvo fue Juan Carlos Thorry quien no llegó a grabar con la orquesta y entre posteriores vocalistas se destacaron Roberto Ray, Ricardo Ruiz, Oscar Serpa, Osvaldo Cordó y Héctor Pacheco. A su entrañable amigo Carlos Di Sarli, le dedicó el tango “Milonguero viejo” y entre otras obras de su autoría surge “Vida Mía” cantado precisamente por el tenor Tito Schipa con su acompañamiento. Sería interminable seguir extendiéndonos sobre lo que significó Osvaldo Fresedo para nuestra música, simplemente nos quedamos con el recuerdo de sus grabaciones y como siempre gracias a otro de nuestros maestros, que enorgullecieron y enorgullecen al tango. Esperemos que con el paso del tiempo, vuelvan a sonar sus tangos por nuestra hermosa Ciudad porteña y, por qué no, por toda la patria, y que su música no sólo se logre difundir en las nuevas generaciones, sino que pueda ser considerada como un auténtico material de estudio para los músicos del porvenir. Gracias maestro por tu arte y por permitirnos emocionarnos con tu sentido bandoneón que lograste interpretar como pocos junto a Pichuco. La Paternal y el tango siempre te recordarán.

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