miércoles, 28 de septiembre de 2016

Trabajadores de empresa Cueroflex tomaron la sede de Chacarita de EDENOR

Empleados de la empresa recuperada Cueroflex tomaron el pasado lunes la sede Chacarita de la distribuidora energética, situada en la avenida Guzmán 302; en reclamo por las facturas. La última boleta recibida por Cueroflex supera los 800 mil pesos, monto similar al que se necesita para cubrir un mes de salarios en la mencionada compañía.
La Cooperativa de Trabajo Cueroflex Limitada se dedica al curtido y la terminación de cueros está ubicada en el barrio de Villa Zagala, partido de General San Martín. Al grito de “Aranguren botón…” decenas de cooperativistas entraron al edificio de EDENOR para exigir que se retrotraigan las facturas a los valores previos al tarifazo.
El presidente de esta cooperativa, Jorge Reisch, fue quien líderó la protesta y declaró al canal televisivo C5N: "Pagamos más impuestos que sueldos a los compañeros. Pagamos 900 mil pesos entre gas, luz y agua, y a los compañeros les estamos dando migajas. Pagamos entre todos los impuestos".
Cabe destacar que la empresa recibió este mes una factura de 813 mil pesos de electricidad, correspondientes al último período, a una boleta adeudada del mes de junio y a 80 mil pesos de multa por el retraso de pago.
El subsecretario de Política Tarifaria del Ministerio de Energía y Minería, Andrés Chambouleyron, les habría dicho a los cooperativistas que no abonaran los importes anteriores, debido a que estos se reajustarían. Como eso no sucedió, surgió esta protesta.
"Él funcionario nos dijo que no pagáramos, porque se iban a retrotraer los valores y ahora, encima, nos quieren cobrar una multa. También nos recomendó que trasladáramos los aumentos a los precios de venta, cuando los zapateros -sus principales clientes- bajaron sus ventas un 40 por ciento, están locos", dijo Reisch.
A los pocos minutos del ingreso de los trabajadores a esta sucursal de EDENOR, representantes de la distribuidora los atendieron y les pidieron que tengan paciencia hasta que se desarrolle una audiencia convocada por la Justicia el 5 de octubre.
En realidad los trabajadores ya habían llevado su reclamo al Poder Judicial del Partido de San Martín, donde finalmente se determinó que ambas partes debían mediar para llegar a un acuerdo en relación con la factura adeudada por la empresa. "Pase lo que pase no la vamos a pagar y de la fábrica no nos vamos a ir", resaltó el presidente de Cueroflex.
Para cerrar, Reisch hizo referencia a la alarmante situación que atraviesan distintas pequeñas y medianas empresas, similares a las que el encabeza. "Nos quieren dejar en la calle. No le dan importancia a las pequeñas industrias, ellos gobiernan para las grandes empresas y para el campo. La industria argentina les importa tres carajos", declaró.
Si bien la Justicia de San Martín había dado lugar al amparo presentado por el intendente del partido, Gabriel Katopodis, el fallo de la Corte Suprema reavivó la polémica. Sucede que el máximo tribunal, el pasado 6 de septiembre, dio el visto bueno al tarifazo propuesto por el Gobierno y las facturas con los aumentos ya comenzaron a emitirse. Como excepción, el único distrito que logró mantener las tarifas fue el partido de La Matanza, en el oeste bonaerense y el más poblado y extenso del Gran Buenos Aires; ante un pedido interpuesto por su intendenta, Verónica Magario.

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