El acto fue presidido por el Legislador Aníbal Ibarra, que propuso la distinción de Adolfo Aristarain, por su labor como director, guionista de cine y productor. Acompañaron al director de cine familiares, amigos, actores y colegas. Además de Ibarra, hablaron Fito Páez, Osvaldo Papaleo y Carlos Andrada, estos dos últimos ex compañeros de trabajo del famoso director. Aníbal Ibarra concluyó la charla, considerando a Adolfo Aristarain una figura clave de nuestra cultura y un director cinematográfico libre, "porque siempre filmó lo que quiso y ahora, después de más de 10 años sin filmar, está esperando una historia que lo seduzca y que el sienta que merezca ser contada". El cierre del acto estuvo a cargo de Fito Páez que interpretó los temas “La última curda” y “Yo vengo a ofrecer mi corazón”, a capella. Aristarain nació el 19 de octubre de 1943 en la calle Andonaegui 1468, entre Hamburgo y Turín, muy cerca de la escuela "Petronila Rodriguez". Su madre era profesora de piano y su padre era sub-administrador de la Casa "Kraft"; una imprenta que en ese entonces editaba la "Guía Verde" que era una guía telefónica invertida. Cuando Adolfo tenía 9 años falleció su padre y el director vivió en Parque Chas hasta los 20, cuando vendieron la casa y se mudaron al centro. En su infancia, Aristarain era muy cinéfilo y solía concurrir a los cines de la zona, como el "Familiar Parque Chas", el Cine Teatro "25 de mayo", el "9 de julio", el "Edén Palace" y el "Grand Bourg". Iba seguido con su madre y era fanático de los westerns americanos. Aristarain es miembro de la Academia Española y fue vicepresidente de Directores Argentinos Cinematográficos (DAC). Sus primeros acercamientos al cine fueron como montador y sonidista en Río de Janeiro y como ayudante de producción en Buenos Aires. A comienzos de los años setenta comenzó a trabajar como ayudante de dirección de manera sistemática y profesional. En 1967 se radicó en Madrid. Continuó aprendiendo el oficio del cine trabajando como ayudante hasta que después de treinta largometrajes asistiendo a directores como Mario Camus, Vicente Aranda, Sergio Leone, Lewis Gilbert, Gordon Flemyng, Peter Collinson, Daniel Tinayre y Sergio Renán, escribió un guión y consiguió realizar su primera película en 1978, "La parte del león". Otros de sus filmes más célebres son Tiempo de revancha (1981); Los últimos días de la víctima (1982); Un lugar en el mundo (1992), que obtuvo el Premio Goya a la Mejor Película de Habla Hispana y la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián; Martín (Hache) en 1997; y Lugares comunes(2002). El Festival de Cine de Carmona (Sevilla) le ha dedicado un homenaje en su tercera edición. Por haber vivido en España desarrolló su tarea como director, productor y guionista de cine entre ese país y Argentina. Es miembro de la Academia Española y fue vicepresidente de Directores Argentinos Cinematográficos (DAC) durante los dos años en que desde esa entidad se promovió la actual Ley de Cine. En el año 2003 le fue otorgada la nacionalidad española por Real Decreto, en mérito a su aporte a la cultura iberoamericana.
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