Como todos los eneros, desde hace unos años, los cortes de luz afectan al barrio de Villa Crespo. Desde el 28 de Diciembre, incluso algunos desde días antes, y hasta estos días, los vecinos aguantan las calurosas tardes abanicándose con la primera revista o diario que encuentra. Y la noche sólo se supera si vence el sueño. Los cortes duran días enteros o son intermitentes. La única certeza que tienen son las pocas horas de luz, a la espera de un nuevo corte. Para conservar la comida buscan algún vecino afortunado con luz o mudando a lo de algún familiar en otro punto no muy lejano, en el mejor de los casos. Sino, deben optar por vivir al día. Y por supuesto la situación también afecta a los comerciantes de la zona. Las heladerías liquidando el poco helado que les queda en condiciones. Tiran los deshechos y pierden dinero. Otras directamente cerrado. “En la otra cuadra hay cables quemados, uno dice SEGBA. No invirtieron un mango”, dice uno de los vecinos “Llamamos a un 0800 y nos dicen que van a canalizar el reclamo pero la luz no vuelve. Nosotros no tenemos problema en seguir cortando avenida Juan B Justo” dice una de las vecinas, indignada.
Una situación que, lamentablemente, se convierte en costumbre y perdura, a pesar del cambio de gobierno.
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